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Las brigadas de Jardinería de los servicios técnicos municipales trabajan en la fumigación de la procesionaria del pino en las zonas verdes municipales de Finestrat. Estas tareas se han llevado a cabo en áreas públicas como son los pinares de la zona recreativa de La Font del Molí, el área deportiva de La Foia, la rotonda de entrada al casco histórico, los pinos del parque Font de Carrè y la zona del Castell. También se ha fumigado en el entorno del centro educativo Balcón de Finestrat, donde se encuentra el colegio de Infantil y Primaria, y la zona paralela a la carretera CV-767.
El concejal de Parques y Jardines, Tomás Sellés, informó que “estamos interviniendo desde hace más de un mes con el objetivo de evitar el contacto de esta oruga con animales domésticos o con los menores que puedan moverse por estas zonas. Recordemos que el contacto físico con estas orugas suele provocar reacciones alérgicas muy molestas como urticaria, irritación en los ojos e incluso problemas respiratorios”.
En la Cala también se ha intervenido en el Jardín de las Olas, en la Avenida Marina Baixa y en la calle Torre de les Maçanes.
Todos los años, entre diciembre y marzo, las brigadas municipales actúan contra este tipo de plagas y recorren todas las zonas donde hay pinos para evitar que se formen nuevas bolsas. “Este no es un trabajo que se haga un día y ya se acabó. Hay que estar continuamente repasando y vigilando que no se formen nuevas bolsas de la oruga de la procesionaria del pino. Estos meses son claves para prevenir y es el momento más adecuado porque la oruga todavía no ha descendido al suelo” ha señalado Tomás Sellés. El concejal también explicó que la plaga de la procesionaria se repite cada año “aunque este invierno hemos comenzado a fumigar antes y estamos detectando menos incidencia. No obstante, prolongaremos los trabajos hasta marzo para intentar minimizar el impacto de esta oruga sobre los árboles y también las molestias que ocasionan a los vecinos que residen cerca de estas zonas verdes”.
Los trabajos de prevención y mantenimiento en el área de Jardinería también abarcan el tratamiento del picudo que afecta a la palmera canaria, variedad especialmente sensible a esta plaga y que se encuentra en diversos puntos de la localidad.