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El Ayuntamiento de Calp celebró el pasado viernes reunión de la Comisión Informativa Especial de Baños de la Reina que incluye al equipo de gobierno y representantes de todos los grupos municipales además de al equipo redactor del Plan Director del MARQ y representantes de la Generalitat Valenciana y de la Diputación Provincial.
De esta reunión surgió una idea clara y es que la línea por la que aboga el Ayuntamiento de Calp es proteger los Baños de la Reina de cualquier tipo de edificación y al mismo tiempo respetar los derechos de los propietarios. Hay que tener en cuenta que se trata de un suelo urbanizable y que el Tribunal Supremo permitió en su día a los propietarios construir.
En este sentido ya en 2018 se barajaron varias propuestas: adquirir el terreno, trasladar al edificabilidad a otro sector urbanístico del término municipal y la construcción con la opción de musealización de los bajos. Esta es precisamente la opción que ahora se descarta con el fin de evitar cualquier tipo de edificación.
Al respecto, la alcaldesa Ana Sala, ha señalado que “ todos tenemos claro que en Baños de la Reina no debe ponerse un ladrillo jamás, se ha iniciado un camino y ya no hay vuelta atrás, ahora hay que llegar al final para adquirir los terrenos y ello supone que todas las administraciones deben involucrarse en las medidas de compensación. Además quiero agradecer a todos su implicación, especialmente a los concejales Juan Manuel del Pino y Pilar Cabrera así como los equipos técnicos de apoyo”. ”.
Mientras desde la Diputación Provincial se ultima el Plan Director de los Baños de la Reina que determinará las líneas a seguir en el yacimiento desde el punto de vista arqueológico y patrimonial.
El yacimiento romano de Banys de la Reina, declarado BIC, es un “vicus” romano del siglos II-III d.C., este enclave costero que destaca por su magnifico diseño arquitectónico y sus mosaicos, siendo en su género uno de los conjuntos más importantes de toda la Hispania romana. Pese a que hasta la fecha sólo se ha excavado una parte de su superficie, resulta suficiente para atisbar la magnitud de esta villae romana dotada de todo tipo de lujos hace 2.000 años. Las balsas excavadas en la roca litoral, destinadas al abastecimiento de pescado fresco, dieron nombre al enclave, topónimo vigente en la actualidad.
En este enclave destaca la Noria, una de las mejores infraestructuras hidráulicas de época romana que se conservan en la Comunitat Valenciana, lo que convierte el yacimiento en uno de los espacios arqueológicos más importantes de nuestro territorio.
