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Dénia se prepara para abrir sus playas a partir del próximo 1 de junio, día en que está previsto que la ciudad, igual que el resto de la Comunitat Valenciana, pase a la fase 2 de desescalada. Medidas de accesibilidad, limpieza, vigilancia, socorrismo, información pero, sobre todo, medidas para garantizar la seguridad de los usuarios, principal objetivo del ayuntamiento. En palabras del alcalde, Vicent Grimalt, «intentaremos que este verano sea lo más normal posible y queremos que la gente que nos visite nos vea como un municipio seguro, en el que se van a hacer cumplir todas las medidas marcadas por el Gobierno central y el autonómico». En esto, los cerca de 20 kilómetros de playa de que dispone la ciudad son, a su vez, ventaja y desventaja. Disponer de tanta superficie de playa es un punto a favor para favorecer la distancia interpersonal y evitar aglomeraciones. En la otra cara de la moneda, las tareas de vigilancia y control se hacen más complicadas por la cantidad de espacio a cubrir.
Las concejalías de Playas y de Protección Ciudadana trabajan conjuntamente para hacer que esta vuelta a la normalidad de la vida en las playas se haga con las mayores garantías de seguridad posibles.
Según ha explicado el concejal de Playas, Pepe Doménech, el departamento ha trabajado «a destajo» desde el pasado mes de enero para devolver las playas al buen estado del que gozaban antes de los temporales de septiembre de 2019 y el paso de la borrasca Gloria a principios de este año. La Dirección provincial de Costas también colabora reparando tramos de la zona de Les Rotes y, en breve, pasarán a la playa de Deveses.
A estas tareas de acondicionamiento se irán sumando las primeras medidas adoptadas por el Ajuntament de Dénia para abrir al público las playas del municipio durante el verano. En la actualidad, se está trabajando en adecuar los 26 accesos con pasarela que el ayuntamiento habilitará para entrar y salir de las playas que registran mayor afluencia de gente, como Punta del Raset, la Marineta Cassiana o Deveses.
Una vez en la playa, paneles informativos orientarán sobre las tres zonas en las que se va a dividir la superficie y los usos de cada una de ellas. La llamada «zona activa», franja paralela a la orilla del mar y la más cercana a esta, se destinará al paseo y tendrá una anchura aproximada de 5 metros para garantizar la distancia interpersonal de seguridad
A continuación, siempre en paralelo a la orilla, la «zona de reposo», para colocar toallas, hamacas o sombrillas y, por último, la llamada «zona de resguardo», aquella en la que se permitirá el juego y la práctica deportiva. Estas dos franjas tendrán una anchura variable dependiendo de la morfología de cada playa. Cada zona estará bien delimitadas por unos surcos en la arena que, a diario, la empresa concesionaria de la limpieza de playas marcará y repasará.
En el caso de Les Rotes, playa de roca, esta delimitación de los usos no es factible, por lo que el estudio de aforo de las playas de la ciudad que va a realizar el ayuntamento será especialmente útil a la hora de destinar medidas de protección que se concretarán en breve.
La limpieza de las playas también se verá reforzada. Las arena de las playas más transitadas tendránue airearse con criba mecánica con mayor frecuencia y las pasarelas de acceso se desinfectarán dos veces al día. Los lavapiés se mantendrán precintados por prevención. Tampoco estarán disponibles, de momento, elementos de juego como pirámides o redes de voleibol.
En cuanto a las playas accesibles para personas con diversidad funcional, el concejal Pepe Doménech ha afirmado que se va a montar toda la infraestructura y estará lista para dar servicio el 1 de julio, como cada año, «aunque debemos esperar las medidas del Ministerio de Sanidad para saber si se podrán utilizar con normalidad o tendremos que implementar, por ejemplo, la cita previa para evitar aglomeraciones y ordenar el uso de sillas anfibias».
Las medidas de seguridad y de limpieza se completarán con una campaña de información y sensibilización entre los usuarios de las playas que llevarán a cabo 12 voluntarios de Cruz Roja. Estos «agentes de sensibilización» se distribuirán por las playas de Dénia a diario, del 20 de junio al 31 de agosto, en horario de mañana y tarde, repartiendo folletos informativos sobre las medidas de seguridad e higiene, recomendaciones para el uso de las playas y un plano en el que se indicarán los 26 accesos principales a las playas. Reforzarán esta tarea informativa dos empleados de la concesionaria de la limpieza de playas, Pavasal. Además, el ayuntamiento instalará dos puntos informativos en lla Marineta Cassiana y en Punta del Raset para completar esta labor de infomación y sensibilización ciudadana.
La vigilancia y socorrismo en las playas estará cubierta por 62 socorristas de Cruz Roja Dénia, concesionaria del servicio. Este año se destinará una partida específica de 10.000 euros para la adquisición de equipos de protección individual y materiales específicos para que los socorristas puedan realizar su labor con garantías. Estos incrementarán la frecuencia de sus paseos por la playa, entre posta y posta, para también vigilar si hay saturación de personas en algún tramo y dar cuenta de ello a los agentes de sensibilización. El servicio de vigilancia y socorrismo se prestará diariamente del 20 de junio al 27 de septiembre. En los meses de junio y septiembre, el horario será de 10.30 a 19 horas y en julio y agosto, de 11.30 a 20 horas.
Durante las primeras semanas de junio, y hasta que comience la vigilancia por parte de la Cruz Roja, personal voluntario de Protección Civil, entre semana, y Policía Local, los fines de semana, se encargarán de vigilar las playas con mayor afluencia del municipio.
En cuanto a chiringuitos y otros servicios de playa, como patines o sombrillas y hamacas, el concejal ha señalado que el único chiringuito adjudicado hasta el momento es el de la Marineta Cassiana. La adjudicación del resto de chiringuitos y de los otros servicios está ultimada en el ayuntamiento a falta de conocer si el ministerio resuelve autorizar este tipo de actividades para hacerla definitiva. El balizamiento de las playas sí se va a llevar a cabo a partir de la próxima semana.
La vigilancia policial en las playas sumará a sus tareas habituales una especial atención a la vigilancia del flujo de personas en las playas y el mantenimiento de la distancia interpersonal de seguridad, ha indicado el concejal de Protección Ciudadana, Javier Scotto. La Unidad de drones realizará desde el aire controles de aforo y reforzará la campaña informativa difundiendo mensajes grabados.
La embarcación de la Policía Local se ocupará de controlar, especialmente, la zona activa, la más próxima a la orilla, complementando la labor de los socorristas. Los quads con que la policía patrulla las playas cada verano servirán de refuerzo, de manera puntual, a la plantilla de informadores.
