Llega el verano y Alicante llena sus playas de gente atraída por sumergirse en el Mediterráneo y broncearse tumbados en su fina arena. Aún así en el interior de la Costa Blanca tenemos zonas donde bañarnos y pasar un verano diferente.
A continuación os muestro una serie de lugares increíbles donde poder daros un chapuzón en aguas bien fresquitas. Es una manera estupenda de conocer la montaña de Alicante, nuestro interior plagado de pueblos con una rica gastronomía, un magnífico legado cultural y unas gentes encantadoras. Os recomiendo visitarlos, hacedme caso.
MAPA DE LUGARES PARA BAÑARSE EN ALICANTE
NACIMIENTO DEL VINALOPÓ (BANYERES DE MARIOLA)
Uno de los sitios más conocidos para los excursionistas alicantinos es el nacimiento del río Vinalopó en Banyeres de Mariola. El río surge en la Font de la Coveta, cerca de donde encontraremos diversas pozas y a donde llegaremos dando un corto paseo desde el Mas de Blanes. Yo os recomiendo que os acerquéis al Molí de la Umbría, a dos pasos del pueblo. Allí encontrareis una preciosa zona de acampada, la Ruta dels Molins y muy cerca del aparcamiento tenéis posiblemente la mejor de las pozas. No os perdáis la variada oferta cultural que ofrece Banyeres, con museos de todo tipo y visitas guiadas a su casco antiguo.
SALINETES (NOVELDA)
Una zona de baño muy pequeña pero que por su curiosidad y facilidad de acceso no podemos pasar por alto. En éste lugar en el que hubieron unos pequeños baños edificados en 1858 encontremos una fuente con agua fríaaaa y dos grandes balsas para estar recostado. Si estamos con ganas desde allí podremos subir al Cid por un sendero marcado. La peculiaridad del manantial es la alta salinidad del agua. De hecho al salir veremos como tenemos todo el cuerpo blanco.
BARRANC DE L’ENCANTÀ (PLANES)
Sin duda un lugar mágico no sólo por la Leyenda de la Encantá sino porque nos hace descubrir la Baronía de Planes, tan llena de lugares encantadores que conservan su impronta rural. Y por si fuera poco a escasos kilómetros tenéis la Vall de Gallinera. Todo un regalo para los sentidos. En la Encantá hay diversas pozas así que ya es cuestión de ir eligiendo según queramos más o menos tranquilidad, desde el Toll Blau al Toll Estret entre otros. En el Toll Blau, para el que se anime, tenéis los anclajes para instalar una tirolina en la que caer al agua.
FONT MAJOR (SELLA)
Pegada a la preciosa población de Sella encontramos la zona de acampada de la Font Major. En ella una balsa de riego adaptada al entorno nos ofrece una zona de baño con zonas de sombra, mesas y demás instalaciones.
EL SALT (XIXONA)
Entre las tierras de secano de Xixona encontramos un rincón bucólico enclavado en una zona de gran interés geológico. El entorno ha sido arreglado hace poco por el Ayuntamiento por lo que ahora dispone de un acceso bastante cuidado con un mirador, barandillas y mesa de picnic, a pesar de lo cual siempre está tranquilo.
MOLÍ DEL SALT, BENILLOBA
Uno de esos sitios mágicos donde escuchar el estruendo del agua y entender la importancia de los molinos harineros hace unos siglos, como el que veremos ya en ruinas, que data de 1760. Si te gusta la fotografía nocturna éste es un enclave que tienes que conocer. En la parte superior que hay cerca del puente hay una zona con tirolina, puente tibetano e instalaciones de rápel. Junto al aparcamiento donde dejáis el coche tenéis una estupenda área de picnic que ha sido adecentada por el Ayuntamiento. Y no dejéis visitar Benilloba, un pueblo con mucha historia.
SALT DE BOLULLA & ESTRET DE LES PENYES (CALLOSA D’EN SARRIÁ)
Cerca del Algar tenemos el Salt de Bolulla y subiendo a mano izquierda el Toll del Estret, un sitio espectacular y apartado con su cascada de aguas transparentes. Más arriba los más intrépidos podrán realizar actividades de escalada.
FUENTES DEL ALGAR (CALLOSA D’EN SARRIÁ)
A solo 3 kilómetros del bonito municipio alicantino de Callosa d’En Sarrià y a unos 15 kilómetros de Benidorm, se encuentran las Fuentes del Algar, uno de los rincones más sugestivos de toda la Comunitat Valenciana y que, en 2002, fue declarado por el Gobierno Valenciano como “Zona Húmeda Protegida”.
Antes de llegar a las Fuentes del Algar hay que recorrer un entretenido recorrido de 1,5 km que se extiende a lo largo del cauce del río Algar. Durante el paseo no solo te toparás con fuentes, cascadas y piscinas naturales a las cuales es difícil resistirse, también podrás ver como el agua, indudable protagonista del parque, ha ido moldeando a su antojo la roca caliza de la montaña. Es un auténtico paraíso para los amantes de la fotografía.
Uno de los rincones más asombrosos del lugar es el Toll de la Caldera, una cascada que acaba su recorrido en una piscina azul preciosa.
¿Hay algo más relajante que estar inmerso en la naturaleza mientras escuchas el sonido del correr del agua? Las Fuentes del Algar son un remanso de paz y no es de extrañar que, en el pasado, se considerara un lugar sanador.
Es una excursión ideal para todos: desde familia con niños a parejas y/o grupos de amigos. Si viajas con niños, que sepas que hay zonas perfectas para los más pequeños: en el Toll de la Figuera y en la Playa de la Tribu las aguas son muy poco profundas. Si en cambio quieres pegarte unos cuantos chapuzones y tirarte al agua al estilo “booomba”, te recomendamos dirigirte hacia el Toll Blau donde hay un trampolín perfecto para los más lanzados. Toll de la Presa es otra piscina ideal donde darse un buen y refrescante baño.
Nuestro consejo es llegar por la mañana temprano y quedarse hasta tarde, disfrutando de baños en las piscinas, de paseos rodeados de naturaleza y aprovechando y parar de vez en cuando en los merenderos para reponer energías.
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