Tiempo de lectura aprox: 1 minutos, 15 segundos
Las concejalías de Educación, Bienestar Social y Sanidad han reanudado, en colaboración con el IES L’Arabí y la asociación Humanymal, el programa de terapia asistida con perros ‘Eduka-dogs’, que se financia a través de una subvención de 7.203 euros de la Generalitat Valenciana.
Un total de 15 jóvenes, de edades comprendidas entre los 12 y 16 años, se benefician de esta iniciativa. Se trata de un programa de terapia asistida con perros dirigido a estudiantes que presentan problemas, bien de aprendizaje, bien personales, sociales o familiares, que pueden incidir en su desarrollo académico.
Cinco de estos jóvenes ya participaron en la pasada edición del programa y ahora asumen el rol de tutores de los chicos y chicas que inician ahora su andadura. Su trabajo consiste en apoyar a sus compañeros en su proceso de formación como guías caninos, convirtiéndose en referentes positivos para ellos.
El Ayuntamiento de l’Alfàs del Pi implantó este programa en 2017. Una iniciativa pionera en la Marina Baixa, con una finalidad muy clara: ayudar a estudiantes con diferentes problemáticas a obtener un buen rendimiento académico y, al mismo tiempo, mejorar sus relaciones sociales y familiares.
‘Eduka-dogs’ destaca, además, por su servicio comunitario, ya que las y los chavales se forman como guías caninos para, a continuación, desarrollar actividades en residencias, con lo cual se beneficia de manera indirecta a otros colectivos y se prestan ayuda mutua.
La respuesta de los estudiantes participantes en las ediciones anteriores revela un elevado grado de satisfacción, y “es todo un acicate para continuar adelante con este programa terapéutico, formativo e inclusivo”, ha manifestado la concejala de Bienestar Social y Sanidad, Marisa Cortés. A nivel emocional, el proyecto ha logrado despertar emociones positivas y potenciar la cohesión de grupo. Por otra parte, “el proyecto también ha supuesto un importante impulso en la motivación académica y en la comunicación familiar”, ha añadido Dolores Albero, concejala de Educación.
Los chicos y chicas realizan una prueba de autoestima antes de empezar con la terapia y también al finalizar ya que, además de mejorar la relación con la familia, los compañeros y su rendimiento escolar, este programa favorece la percepción que tienen de sí mismos y su capacidad a la hora de enfrentarse a retos.