Las excavaciones que se realizan, desde hace cinco años, en el poblado fortificado andalusí del Castellar de Alcoy, impulsadas por el Museo Arqueológico Municipal Camilo Visedo Moltó, y autorizadas por la Dirección General de Cultura y Patrimonio de la Consellería de Educación, Cultura y Deporte, bajo la dirección del arqueólogo Germán Pérez Botí, están ya en su recta final. En una reunión realizada este verano entre el Ayuntamiento de Alcoy y Juan Antonio López, Jefe de servicio Territorial de la Consellería de Cultura de Alicante y el cuerpo técnico se decidió que, a causa de la importancia de los elementos que ya han visto la luz, que por si solos escenifican el asentamiento, las excavaciones acabarían en 2021 para hacer hincapié en la consolidación y el valor cultural del yacimiento.
Por un lado, ya se trabaja para la declaración de Bien De interés Cultural (BIC), distinción importante para garantizar su conservación y la opción de poder acogerse a las ayudas para estos bienes que da la Generalitat. De la otra, la concejalía de Patrimonio Histórico también trabaja en su puesta en valor, tanto cultural como turística. Una mejora que pasa por la adecuación de los accesos y para permitir a sus visitantes, a través de diferentes paneles y de la tecnología, la comprensión de este importante poblado relacionado con el pasado árabe de Alcoy.
A lo largo de los últimos años, se han encontrado diferentes elementos, consolidando la relevancia de este yacimiento ya que, por un lado, han aportado valiosa información sobre el pasado árabe de nuestra ciudad, y por otra, se trata de un descubrimiento importante en el ámbito provincial al estudiar el inicio de la presencia andalusí en estas tierras, un hecho histórico poco conocido e investigado.
La concejala de Patrimonio Histórico, Lorena Zamorano, destaca la importancia de este nuevo recurso cultural: «En los últimos años, gracias a las excavaciones impulsadas por el Museo Arqueológico Camilo Visedo, y la dedicación, constancia y dirección de la arqueólogo alcoyano, Germán Pérez Botí, hemos descubierto en el Castellar un poblado fortificado andalusí de gran importancia. Las excavaciones han sido significativas y ahora es momento de centrarse en su conservación por lo que estamos ya trabajando en el expediente para solicitar su declaración como Bien de Interés Cultural (BIC). Una conservación que también tiene que ir de la mano de la adecuación y la interpretación porque los visitantes no especialistas en arqueología puedan conocer esta parte significativa de la historia árabe de Alcoy».
Entre los trabajos realizados destaca la exhumación total de la muralla de unos noventa metros de longitud, construida con mortero de cal y piedra. Adosados a ella se constataron tres contrafuertes semicirculares de grandes dimensiones que tenían la función de contener la muralla, los diferentes departamentos que a ella se adosan en el espacio interior y un aljibe de grandes dimensiones. En cuanto a las estancias documentadas, se han encontrado muros de masonería de los cuales se conservan hasta casi dos metros de alzado.
Por lo que respecta al interior se exhumó, entre otros elementos, un ajuar doméstico propio de las comunidades andalusíes que habitaron el poblado fortificado a finales del siglo X y, sobre todo, durante la primera mitad del siglo XI.
